MÓVIL O CELULAR / JULIETA O PAULINA

Resulta que el celular o móvil, como le llames, es una parte importante ahora en mi vida. Y creo que también para muchas de las personas que me leen. He puesto en mi móvil personal la música de dos canciones de mexicanas: Julieta Venegas y su "Limón y sal" y Paulina Rubio con su "Ni una sola palabra". Cuando me llaman por teléfono, suena la Venegas y me trae una sensación de amor. Porque esa canción se la he dedicado a la persona que comparte mi amor. Y la de la Paulina, suena cuando me llega un SMS... entonces escucho "ni una sola palabra, ni besos ni miradas apasionadas..." y sé que me ha llegado un mensaje.
En el móvil de la Asociación Aveletra, tengo una melodía de las que trae en los accesorios. Ahí no he puesto nada raro. Ese es de trabajo tradicional y no se personaliza.
Cuando voy en el auto, me pongo a la Venegas, me acompaña sobre todo cuando conduzco en carretera. Disfruto ir cantando con ella. Me recuerda un poco a México. Ahí fue donde la escuché por primera vez y me gustó tanto que ahora, después de diez años la disfruto más.
A Paulina, sólo la escucho por la radio. No tengo su disco ni he asistido a ningún concierto, pero me recuerda también a México. Me lleva a los años de "Timbiriche" (el grupo en el que comenzó siendo una niña). Con ese grupo bailé en compañía de mis amistades de entonces. ¿Qué será de mis amistades de hace veinte años? ¿Aparecerán si pongo en un buscador su nombre? ¿Me recordarán? Qué época tan bella. Diferente, entrañable.
Al medio día veo la telenovela mexicana "Esmeralda". Disfruto cómo Leticia Calderón se sobrepone después de sufrir por amor. Me desconcierto con la relación de "Gracielita" y su madre. A ratos espero que se reconcilie con Adrián y otros pienso que pasó su oportunidad en ese amor. Cada día, mientras como y reposo la comida, disfruto viéndolas y cogiendo un trocito del aire de mi tierra.
Tengo ganas de ver a mi gente. De abrazar a mi familia. De comerme unos tacos. De ver esas calles tan grandes. De disfrutar de mi país.
Soy feliz donde estoy. Soy feliz, aunque esté lejos de mi tierra, porque estoy conmigo misma. Porque disfruto cada momento que vivo. Porque comparto el amor con los seres que me rodean. Y porque creo que los que amo, aunque estén lejos estarán bien. También extrañándome, pero felices.
Un abrazo a cada persona con la que amo en la siceridad del amor.