HE DECIDÍDO DEJAR DE FUMAR

Ayer lunes, comencé una terapia grupal para dejar de fumar. La cita del día: "He decidído dejar de fumar". Fui a la primera sesión no muy convencida de dejar el vicio del tabaco al que regresé hace tres años, después de siete de haberlo dejado. Recuerdo la vez pasada que lo dejé que me costó trabajo quitarme el vicio. En esa época hacía Tai-chi, Chi-kung y Meditación todos los días. Aunque tenía el cuerpo equilibrado con la mente, el tabaco no era fácil dejarlo. Un buen día con fuerza de voluntad me decidí y conseguí dejarlo durante casi siete años. Cuando llegué a España a vivir no fumaba. No pensaba en el tabaco para nada. Si no veía una cajetilla o un cigarrillo ni me acordaba que existía ese vício. Recuerdo que hasta mi pelo olía mejor, pues no tenía el olor desagradable del humo del tabaco. Eso sí, fuí fumadora pasiva durante cuatro años. También en la oficina donde trabajaba era fumadora pasiva. Y un día, en un bajón de ánimo me dió por fumar un cigarrillo. Después fumé otro. Al día siguiente fumé tres. y al tercer o cuarto día, estaba comprando la cajetilla de cigarros. Recuerdo que a Víctor le dije que "por favor no me dejara volver a fumar", pero el primer día que él me vió y me dijo "no fumes", le contesté que me dejara. Ya estaba otra vez en el vício y además en mi etapa rebelde, así que no iba a permitir que me dijeran lo que tenía que hacer. Si deseaba fumar, lo haría. Una respuesta tonta para una resolución tonta, pero así es el vício del tabaco. Te agarra y no te deja fácilmente. "He decidído dejar de fumar". Me lo repito constantemente hoy que inicio mi segundo día de cursillo para dejarlo y me convenzo de que lo haré. ¿Por qué si una vez ya lo hice y me sentía bien sin fumar no podría hacerlo ahora? Soy fuerte en todos los sentidos y le ganaré la batalla al tabaco. Eso creo, eso espero y así será. "He decidído dejar de fumar".