28 noviembre 2006

TAMBIÉN CAMBIO COMO LAS ESTACIONES

De repente estoy en el lugar que me corresponde. La vida se armoniza, las situaciones se ponen en su sitio y es difícil pensar en detenerse en el camino. La vida está llena de pasiones. Nos alojamos en casas, somos los peregrinos del movimiento.
Soy feliz, me permito disfrutar de la tarde. Hago mi trabajo con gusto. Me adentro en la sociedad con la frente alta. Sé que las puertas se me abren a cada momento.
De repente lo he desvelado. He pasado el mal trago y debo quitarme las algas que se me incrustan en los brazos. Los hongos, las enfermedades, los contratiempos, son oportunidades para salir adelante. Para no detenerme y hacer lo que me corresponde a tiempo.
Llevo mi propia marcha. Cada uno tiene el taconazo o su corrida en los pasillos. Así que suelto los zapatos, levanto las ideas y la maquinaria sigue su paso.
Es la historia la que guarda las huellas. La que se detiene a analizar y pasar en tamiz lo que estamos construyendo.
La libertad es el único estandarte. La libertad genera respeto y felicidad. Lo digo para mí. Te comparto en el ahora. Te comparto en él, ahora.
Estamos construyendo.

Elizabeth HERNÁNDEZ QUIJANO.
2006

26 noviembre 2006

DÍA CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO II

DÍA CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO

Ayer sábado 25 de noviembre, se festejó el “Día Contra la Violencia de Género”. El viernes se leyó mi poema publicado en esta blog dentro del programa de Marina Fortuño en Radio Zaragoza. Me entrevista Geraldine Hill y Marina en directo. Estaban también otras autoridades importantes comprometiéndose para salvar a la sociedad.
He levantado la voz. He revelado al mundo que me han lastimado. Ahora debemos comprender, que tal vez, no se han dado cuenta de que lo están haciendo. Por eso, para aquellas personas que no comprendan hasta dónde se puede lastimar, les pongo algunas de las características para identificarlas y buscar el mejor remedio. El amor es importante para la libertad.
Son toda agresión física (hematomas, heridas, fracturas, quemaduras, bofetadas…), psíquica (amenazas, humillaciones, exigencia de obediencia, tratar de convencer a la víctima de que ella es culpable de cualquier problema, insultos, aislamiento, el control de las salidas de casa, descalificar o ridiculizar la propia opinión, humillaciones en público, así como limitar y retener el dinero) o sexual (siempre que se imponga a la mujer una relación sexual contra su voluntad; si además se produce una penetración forzada se considera violación), producida en el ámbito familiar y que suponen un atentado a la dignidad de la persona.
Aquí agrego, que esto mismo se aplica para cualquier ser humano, sin importar la sexo, raza, cultura, religión, país, edad o problemática que presente. Si requerimos ayuda, hay sitios para encontrarla.
En esta entrevista, dentro de una tertulia fui la maltratada de la tarde. El estandarte de un silencio que debemos romper. La felicidad se encuentra en la armonía que producen los encuentros. Disfrutemos. Por eso aquí, ahora, dos poemas acompañan mis palabras.

LIBERACIÓN
Ahora no me asestas
bofetadas con tus actos.
No me penetran tus desprecios.
Soy una concha y me arrastro.
En el fondo del mar
espero una ola que me abra.
Dejaste de ser mi roca,
el huracán que rizaba la arena.
Ahora eres el ancla que golpea
y no me deja salir del puerto.

No vuelvas aquí con el recuerdo.
Ya no me tocas, dentro.
No emiten sonido mis brazos,
ni está esperándote el cuerpo.
Ya no me fustiga tu palabra.
Ya no me lacera tu mirada.
Se ha secado el agua
en la que bebía con calma.
Me soltaste como una copa.
Deja que me libere.
Ya no me tocas, dentro.


GOLONDRINAS
Las golondrinas son comunes en esta tarde,
como las ganas de quitarme los zapatos
para echar a correr lejos del dolor
que me provocan tus desprecios en el estómago.
Ya es nauseabunda esta sensación
de estar en el otro lado de la balanza.
Se convirtió en costra el corazón,
es de acero
y disimula
para reflejar una sonrisa.
Está incrustado sobre una roca.
El sol me recuerda que hace frío,
que todo lo debería ver nuevo
y no con los dientes apretados.
Estoy en erupción con un tapón en el cuello.
Soy una botella de cava
y las burbujas crecen, crecen.
Volaré algún día con las golondrinas.

El primero se lo entregué a Cristina Pérez para su programa. Me dijo que lo leería el sábado, después del manifiesto. No lo escuché. Estaba en la compra, pero sabía que mi voz estaba circulando.
Al poema Golondrinas, le puse voz en el programa “Hola Huesca” de Nuria Garcés, acompañada de Francisco Aso, que puso música de fondo a mis palabras.
Recomendación musical personal: No controles de Olé Olé con Marta Sánchez
Cantanto en su sensualidad una realidad que apenas está descubriéndose.

24 noviembre 2006

DÍA CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO

DESCARO

Me avergüenzan
tus valores con ceros,
Las caricias de precio,
tus patrocinios, bandolero,
escondido tras el desprecio.

Está la casa llena de nosotros.
La acomodamos a nuestro gusto.
Quién se queda con ella
y cual se lleva el nido de campanela.
Todo inició en la palabra.
¡Que fueran reales los escritos!
Que no se los llevara el viento
y se fueran cumpliendo en el piso.

¿Recuerdas el helado que me negaste?
El bochorno al pedirte para la compra.
¿Te has puesto en mi lugar
al desear besarte?
Me has entendido cuando era una copa rota.
Olvidaste las veces que pase
por las puertas y los armarios,
ahora huelen a moho
hasta nuestros cuerpos a diario.
Sobrellevan el compromiso.

Estoy cansada de ser
sólo este mueble.
Acaso crees que volveré a rogar,
que otra vez sentiré
que es mi culpa.
Lo siento, llegue tarde por rodar
pero no soy una puta.
Estoy lejos de tu conciencia
de tus desprecios,
de tus ganas de controlar el trayecto.
El amor es mi precio
y no supiste encontrar recovecos.
Estás lejos, excelente me siento.
No me ahoga la casa
ni me molesta el silencio.

Acaso crees que volveré a rogar
que otra vez pensarás "es su culpa".
Lo siento, llegue tarde por rodar
pero no soy una puta.


ELIZABETH HERNÁNDEZ QUIJANO