ATARDECER PARA LAS AMISTADES

El atardecer de hoy, tenía unos colores que iban desde el naranja hasta el rosado. El sol se reflejaba en las montañas y hacía que los árboles de flores amarillas se vieran más brillantes. Todavía no conozco los nombres de todos los árboles y arbustos de esta zona, pero me gustaría conocerlos, así que si alguno o alguna sabe el tipo de plantaciones que hay entre Huesca y Barbastro, llegando hasta Monzón, Aínsa, Benabarre, Graus, Boltaña... ¿podrían contarme algo? Yo sólo sé que son preciosos esos campos. Ayer también vi cabras pastando entre las montañas. Muchas cabras, tantas que hacían una polvareda impresionante entre los arbustos.

Como les iba contando, para variar venía cantando boleros de los Panchos (es que me llegan) y me acordé de las amistades que tengo por diversos sitios y a las que hace días no les escribo ni un correo por el acelere de vida que llevo. Así que me dije, mientras veía caer el sol cerca del Castillo de Montearagón: "Voy a escribir en la blog que les quiero aunque tarde mucho en contestar a sus correos. Que les extraño y agradezco que a pesar de la distancia guarden un trocito de su amor para compartirme. Que tienen un lugar especial en mis recuerdos. Que muchas veces me gustaría estar acompañandoles, pero a veces por la distancia, las ocupaciones, el acelere, o la vida que da vueltas y vueltas, no podemos estar juntos como me gustaría. Quiero que sepan, cada una de las personas que han ocupado y ocupan un espacio en mi vida, que cuentan con mi amistad. "

Y retomando el atardecer de hoy, que aunque caluroso era para fotografía, seguí cantando al ritmo de la canción "Sabor a mi" mientras recordaba: Abrazos amistosos. Besos que acompañan. Ojos en los que te miras como un reflejo y en su profundidad te pierdes hasta tocar el alma.