ESCURRIDIZA

Tienen razón. He dejado de escribir en este diario por varios días. La vida me ha llevado a demasiadas cosas reales que no me he dado tiempo para reflexionar con ustedes.
Ya terminó el Festival de Cine. Por cierto, me la pasé estupendamente, las películas y cortos eran la mayoría espléndidos. También disfruté de muy buena compañía. Siempre había alguien conocido o con mucha amistad para compartir esos gratos momentos de cine y las críticas y reflexiones sobre los temas tratados valieron la pena.

Esta semana he trabajado mucho. Tengo que llegar a mi número de ventas que me exigen para mantener el trabajo, y es estresante a ratos. Pero me gusta y voy llevando ritmo. Lo disfruto y me encanta andar por lugares nuevos. Además, tengo oportunidad de conocer sitios que ni siquiera sabía que existían.

El otro día conocí a una familia que está poniendo una granja de cerdos y tienen un pequeño huerto. Me regalaron cinco cabezas de ajo de sus tierras y el auto estuvo toda la tarde oliendo a comidas en las que son escenciales el ajo. Creo que variaban dependiendo de mi estado de ánimo y del paso del tiempo, porque de regreso a casa, por la noche, olían a tostadas de tomate con ajo. También me dieron albaricoques, ¡uuummmm!, deliciosos.

Ese mismo día, detrás de mí, venía la guardia civil. Pero no "atrás de mí", que es una diferencia muy sutil pero importante. Mi teléfono móvil sonaba y por supuesto que no podía ver ni quién era. Fueron unos minutos estresantes, pero creo que conduzco bien, porque no me pararon. Iba a una velocidad constante, cantando a ARTURO MEZA (es un cantautor mexicano que me gusta mucho) y paré en Siétamo a ver clientes y a contestar la llamada que tenía pendiente. Eso me hizo ser más consciente de que no se pueden contestar llamadas mientras conduces, porque seguro me hubiera caído una multa que no puedo pagarme ahora. Además del riesgo para los demás conductores de al lado. (Que consciente me ví, jajajajaaaaa, espero conseguirla con naturalidad y felicidad).

Bueno, pues ha pasado la semana, el MARTES LITERARIO, que estuvo bien, pero otros años ha estado más animado. En lo personal, eso de estar en el Casino me gusta menos que estar en el Centro Raíces, pero ni modo, si los socios quieren el CASINO, eso se pide. Aunque para el próximo año, cambiaremos de formato? Tal vez podríamos poner un taller de una hora antes de cada sesión, así sacaríamos más jugo? Lo consultaré con los socios.

Así que, aquí estoy de viernes. En teoría saldré con CIERZO, si es que no me da plantón. Si no, me iré a ver la ciudad un rato. Otra amiga me dijo que si tenía tiempo, la llamara para vernos. Así que tendría una tercera opción.

Mi hijo está contento porque le he comprado un perro. Se llama SATU... tiene apellidos, pero no me acuerdo ahora de ellos. Es un sabueso, tipo inglés que no crecerá mucho. (Eso nos dijeron). Algo así como Bliger o no sé qué... seguro mi hijo ya se estará informando de cómo cuidarlo. Está emocionadísimo. No debe tardar en llegar.

Bueno, espero que si alguien me lee, aparte de ustedes mis adoradas CIERZO Y NUSE, me envíen un saludo, pregunta o lo que quieran. Todo lo que el buen uso de la palabra y los sentimientos pueda transmitirse por este medio.

Besitos y espero contarles con más calma otro día.

Cada tarde es diferente.
El cielo cambia, las nubes toman otras formas.
El sol se repliega en otros tonos.
Los campos están segados,
los frutales comienzan a notarse.
Los grillos cantan cuando vengo de regreso
a esta casa donde espera mi hijo.